jueves, marzo 01, 2007

Soy seguidor del Anticristo, creo...


El Papa Benedicto XVI (Joseph Ratzinger).

Como estará la cosa en Roma que para reconfortarse ahora Ratzinger se presenta como el héroe que nos advierte del Anticristo, y según sus ejercicios espirituales, éste es "pacifista, ecologista y ecumenista". O sea que ya saben, si el Anticristo es eso, entonces seguramente según la iglesia católica Jesús debe ser bélico, destructor del ambiente y fundamentalista. ¿No será acaso que Roma se ve en el espejo y como los políticos, empieza hablar alrevés a la Orwell? ¿Es que no acaso pensaban también los dictadores - desde Hitler a Castro - que ellos hacían el bien?

¿Acaso olvida Roma la encíclica Pacem in Terris de Juan XXIII que pedía por la paz en medio de la Guerra Fría? ¿Acaso olvidan los llamados de San Francisco a cuidar a nuestros otros hermanos animales y vegetales? ¿Acaso olvidan a Jesús, que no tuvo problema en pedirle agua a la mujer samaritana? Sí, lo han olvidado, y hoy la iglesia solo piensa en lo que más le preocupa: sexo.

No por nada la jerarquía mexicana fue la única que protestó ante la nueva ley de protección a la explotación infantil. No por nada más de cien sacerdotes han sido acusados de pederastía en San Diego, y la arquidiócesis se ha declarado en bancarrota: para no indemnizar a las víctimas.

Los sacerdotes, la jerarquía solo piensa en sexo mientras el mundo se queda sin agua, mientras Colombia y Venezuela compran millones de dólares en armas, mientras el islam se fundamentaliza en Irak... El sexo obsesiona a la iglesia católica, porque los sacerdotes están muertos de sed, por sed de afecto. Por eso muchos roban dinero de sus fieles, o caen en alcoholismo, o se vuelven adictos al trabajo, o al sexo facil en baños saunas o.... abusan de los más débiles. Y lo que es peor, no piden ayuda. La iglesia se está alejando de Jesús y está siguiendo al Anticristo, pero al verdadero: a su propia sombra. Pero el árbol debe secarse en invierno, antes de que llegue la primavera...

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