El periodista de un pequeño periódico de un ciudad no muy grande del sur de Guanajuato, Acámbaro, publicó una noticia que revela usos no de buenes públicos para fines privados (empresariales) de un ex alcalde del PAN. Este demandó al periodista a través de la Ley de Imprenta del estado y el poder judicial local condenó al periodista a tres años de prisión... El periodista no se amedrentó, y solicitó un amparo... que a final de cuentas fue concedido por la primera sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la que anuló la sentencia guanajuatense al afirmar que su ley de imprenta es inconstitucional. Wooooooow!!!!!! Milagros aún suceden en México...
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario