"Para la Secretaría de Gobernación (SG), el gasto de cien mil pesos –tomado del presupuesto de esta dependencia– para patrocinar una comida con la jerarquía católica fue una erogación “razonable, no estratosférica”.
Fue una comida –dijo Salvador Beltrán del Río, director general de Asociaciones Religiosas de la dependencia– que se ofreció a los señores obispos y arzobispos (miembros de la Conferencia del Episcopado Mexicano), “y no consideramos que haya sido, de ninguna manera, un gasto estratosférico para el número de comensales que asistieron”.
El mes pasado la Secretaría de Gobernación emitió un documento en el que asegura que la erogación referida corresponde a una partida para “congresos y asambleas” en favor de cualquier organización que lo solicite.
Sin embargo, admitió también –como hizo ayer Beltrán del Río– que hasta el momento este subsidio para actos ajenos a la SG sólo ha sido en favor, al menos en el sexenio calderonista, de los jefes de la Iglesia católica..."
Lo que me alegra es que vivimos en un estado laico, que si no... Lo triste es ver como gastan dinero público para fines privados. Si se tratara de remodelar catedrales que son monumentos históricos de la nación no hay problema, pero si es alimentar el ya gran apetito eclesial, ahí tenemos no sólo un problema, sino una gran confusión. Extraña que a estas alturas el gobierno siga confundiendo a Dios con el César...
Parafraseando el anuncio de Master Card:
Comida que se paga de los impuestos ciudadanos a la conferencia episcopal: 100 mil pesos
Debilitar el Estado laico: no tiene precio...
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