jueves, abril 19, 2007

La escuela mexicana: ¿enseña violencia o respeto?

Los 10 detalles de los materiales que dejó el asesino de Virginia

En lugar de juzgar a Cho Seung Hui, el joven coreano que asesinó a tantos Virginia Tech, porqué no tratar de comprender qué le sucedía, para evitar que se repita... Lo bueno (de lo malo) es que nos dejó unas fotos, textos (que no se han hecho públicos) y vídeos. Y a partir de ello se comprende un poco qué le sucedía. La frase que me más suena lógica, en medio de toda su letanía de odio, es ésta:

Me arrinconaron y tuve una sola opción

Creo que este joven se dirigía a sus compañeros de su comunidad escolar, porque creo que fue víctima de mucha discriminación. Cito de El Universal:

"
Cho se lamenta y dice "yo no tenía que hacer esto. Lo podía haber dejado y haber huido. Pero no, no correré más. No es por mí, es por mis niños, mis hermanos y hermanas a quienes ustedes jodieron. Lo hice por ellos".

"Tuvieron cien mil millones de oportunidades y formas de haberlo evitado hoy. Pero decidieron derramar mi sangre. Me arrinconaron y me dejaron una sola opción. La decisión fue de ustedes. Ahora tienen sangre en sus manos que nunca se lavará", agrega Cho..."

Muchos jóvenes en todo el mundo son discriminados en sus escuelas, por ser extranjeros, de otra raza, por ser gays... y muchas veces esas burlas, esos desprecios, empiezan desde la niñez. Por ello creo que otra noticia debe llamarnos la atención: la ONU afirma que los mexicano/as toleramos la violencia hacia los niños y niñas. Diario mueren en México dos niños por esa causa reporta el Informe Nacional sobre Violencia y Salud elaborado por la Secretaría de Salud y auspiciado por Naciones Unidas. Lo peor es que el número de suicidios de menores de 15 años se ha disparado. Algo estamos haciendo terriblemente mal, y ese algo, involucra a las familias y a las escuelas principalmente.

El diario Reforma (Ciudad-1) publicó el pasado 21 de noviembre de 2006 que un estudio de Unicef y de la SEP que impera un clima de intimidación en las escuelas. Cito:

"... encontraron que el maltrato y la discriminación son cotidianos en las secundarias, y se revelan a manera de burlas, apodos, golpes y violencia sexual. En las entrevistas realizadas a los jóvenes se encontró que el 14 por ciento de los adolescentes ve en la violencia de grupo una razón para dejar a la escuela, y un 11 por ciento más afirma que la intimidación por parte de los profesores es causa de deserción... "De mí se burlaban porque decían que soy gay. Empecé a faltar y cuando bajé en el promedio total, me corrieron", expresó un joven de 15 años que abandonó la escuela..."

Una encuesta de la SEP y el Instituto Nacional de Psiquiatría detectó que el 30 por ciento de los alumnos percibe a sus compañeros de escuela como peligrosos y el 37 por ciento cree que su escuela no es segura.

Ojalá la recién creada Fundación Mexicanos Primero voltee a este problema, por si no lo observamos y nos hacemos los ilusos, los jóvenes y niños se seguirán matando a sí mismos y unos a otros. Será necesario empezar a crear un clima de respeto e inclusión, donde la escuela sea un espacio de diversidad y tolerancia para todos y todas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Buen Alfredo:
Soy un asiduo aunque silencioso lector de tu página, me gusta mucho y siempre la recomiendo.

Escribo para opinar, es cierto, en las escuelas (oficiales y particulares) siempre se enfrenta violencia, yo la sufrí porque decían que era gay (no se equivocaban) aparte tenía sobrepeso, lentes de fondo de botella, tenía apodos, me daban balonazos, era malo en deportes, en fin un completo desastre sin amigos.
Llegaron a ahorcarme con un cinturón por tratar de calmar un pleito en el salón. No soy el único que ha pasado esto y lo superé porque tuve y tengo el amor de mis padres, ellos me enseñaron a defenderme con palabras, con argumentos a hacer valer más la inteligencia que la fuerza bruta. El mundo es terrible y violento pero cuando existe motivación interna, amor a lo que se aprende, todo se supera.
Quisieron destruirme pero no pudieron. Hoy los que trataron de ahorcarme desgraciadamente están en la carcel, son delincuentes.

Ya ni sé qué escribo, sólo quería compartir eso y reconocer que aunque me hirieron no me mataron.

Gracias.

Abril azul dijo...

Observo la gresividad en el Conalep Valle de Santiago, he hablado con los jóvenes, pero eso no es suficiente,ya que están rodeados de violencia y la ejercen de forma inconsciente; los docentes necesitamos prepararnos mejor para apoyar el cambio, creo que necesitamos atención psicológica para iniciar desde nosotros; un proyecto para cambiar por lo menos desde la escuela, aunque sabemos que esto viene ya de la familia, reafirmándose en las instituciones sociales, los medios de comunicación influyen fuertemente. El modelo económico que vivimos nos obliga a estar menos con nuestros hijos, pero debemos trabajar.
ABRIL AZUL