Hoy fue un día triste. Por más que espere, mi estrella nunca apareció en la playa. Es triste creer que tu estrella que siempre viene a saludar aparecerá hoy, pero no lo hace. Y viendo al enorme mar te preguntas porqué no vino, estará bien, aún querrá charlar conmigo? Y la noche cae, y aparecen las estrellas en el cielo, pero la tuya no está contigo, y sólo sientes la fría brisa peinar tu cara como tratandote de decir, espera, algún día tu estrella volverá... Y tú solo volteas a ver al cielo y te dices: ojalá esté aquí para recibirla, ojalá aún pueda estar aquí para volver a verla... Ojalá pueda decirle al menos que la extraño, y que aunque la playa es hermosa, se siente terriblemente sola sin ella.
jueves, mayo 04, 2006
Tristeza
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1 comentario:
Hola. ¿sabes? Me identifico con tu post. No me gusta que alguien más influya en mi estado de ánimo, pero al mismo tiempo son las cosas que hacen que uno se sienta vivo. No lo sé... jeje.
Suerte!
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