En otra muestra de erudición científica, un alto jerarca de la iglesica católica en México habla como su fuera Premio Nobel. Y es que el obispo de San Cristóbal de las Casas, en Chiapas, Felipe Arizmendi afirma que las semillas transgénicas forman parte de un programa "de muerte". Esto en su sermón de hoy que adelanta a los medios (La Jornada de hoy, versión escrita) días antes. También agrega - y con lo que concuerdo - que la gran importación de maíz de Estados Unidos, que es altamente subsidiado, los productores mexicanos simplemente no pueden competir. Pero una cosa es erigirse en autoridad en ingeniería genética y otra hablar de comerio. ¿Porqué tienen los jerarcas de la iglesia católica hablar de todo? ¿Será que no les da pena parecer estúpidos? Yo creo que ni siguiera saben qué es una organismo genéticamente modificado ni cómo se producen. Ahhh, ¡pero como hablan!
En otro tema cercano, la BBC cuenta como la Arquidiocesis de Morelia retiró al Padre Alfredo Gallegos, parroco de Chucandiro, Michoacán, sin explicar a su feligresia nada. Y la gente molesta, simplemte cerró la parroquia y dice que no quieren a otro cura, y que mientras no regrese el Padre Gallegos la iglesia seguirá cerrada, ya que dicen él era muy trabajador y ayudaba a la comunidad. Mensaje para la buena gente de Chucandiro: no pueden ir a Roma y cerrar San Pedro porfavor. Quizá así la Maldita Sede se de cuenta que no puede seguir decidiendo sobre los feligreses y negar su libertad. ¡Cómo me encantaría ver a la Guardia Suiza persiguer a la gente de Chucandiro dentro de la Basilica! Eso es lo que necesira Roma otra vez: que los cristianos tiren a un Imperio.
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