Desde los 1970s una gran fuerza política, económica y social ha surgido en el mundo: el poder de las organizaciones no gubernamentales, o del tercer sector como también se le conoce.
De Alcohólicos Anónimos a Greenpeace, de la Cruz Roja a los rotarios, pasando por las universidades privadas y las asociaciones de vecinos y de profesionistas... el surgimiento del poder de los ciudadanos organizados a ayudado a mantener lazos sociales donde los gobiernos y las empresas simplemente han fallado, ya sea en las intensas desigualdades de Manhattan o en las masacres de Bosnia o Ruanda. Pero... ahora muchos se pregunta si las ONGs se han vuelto más parte del problema que de la solución. Se han convertido muchas veces en organizaciones burocraticas, opacas, centralizadas y ineficaces. ¿Cómo adaptar a las ONGs a los retos tan grandes que presenta el nuevo siglo? ¿Cómo hacerlas de forma tal que sus miembros se apropien de ellas? Alex Steffen escribe en Worldchanging un pequeño pero brillante artículo sobre el tema y presenta sus propuestas -que creo podrían aplicarse por igual a las empresas y al gobierno. Una de las ideas innovadoras: una verdadera red de advocavy es como una red social como Friendster, Tribe.net o Flickr. Mmmm, la idea no suena mal, y el artículo tiene mucho más.
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