Sucede que la Conferencia Jesuita de Estados Unidos - el espacio que reúne a todas las provincias jesuitas de ese país - tiene una revista, el National Jesuit News. Sucede que Erik Meder fue despedido de su trabajo en las oficinas de la Conferencia en Washington, por publicar un artículo en la revista sobre la necesidad de la Iglesia Católica de hablar el tema de la homosexualidad. El artículo titulado "Extraños no más. ¿Quién es el Otro entre nosotros?" apareció en la edición de abril/mayo de este año de la revista.
"Me pidieron que renunciara por haber publicado el artículo," Meder dijo. "Porque el artículo estaba ya en la imprenta, había causado me explicaron, "un daño irreparable a la Compañía de Jesús en los Estados Unidos". "
¿Cuál daño irrepatable a la Compañía puede ser un artículo? Piensen en Ratzinger como Papa y el reciente despido de Reese de America. Los jesuitas están muertos de miedo y Roma debe estar más que feliz. Más que patético, pero no es lo peor...
El secretario ejecutivo de la Conferencia Jesuita de Estados Unidos le dijo al NCR que ... "una vez que nos dimos cuenta del error, paramos el envío de la revista." Comentó que dos cientos de copias no fueron enviados por correo, la mayoría de ellos para lectores de fuera de Estados Unidos. 3200 jesuitas leen la revista sólo en las provincias de Estados Unidos.
Y no paró ahí Gaunt. ¡El artículo de Meder fue borrado de la edición de internet de la revista!
Autocensura en la Compañía de Jesús... Si San Ignacio viera ésto.... Gaunt sencillamente no tiene la dignidad de llamarse jesuita. La vergüenza cubre el escudo de los lobos y el caldero.
Meder afirmó que "la razón oficial del despido que al haber decidido publicar el artículo yo mostré "una falta de prudencia, "una falta de discreción" y entonces no puedo ser ser recipiente de confianza en el futuro para representar a la oficina nacional como enlace, que era mi trabajo."
En el artículo, Meder argumenta por un diálogo abierto en la iglesia con los homosexuales.
Él escribió: "El mismo porcentaje aproximado de la población de Estados Unidos es homosexual y nacida en otros suelos: entre el 10 y el 15%. La mayoría de los católicos estadunidenses son uno ni lo otro..."
"Cuando el Otro es migrante, se le pide a los católicos por parte de la iglesia que desplieguen una hermeneutica de la auto-comprensión en sus encuentros con el Otro. Cuando el Otro es homosexual, la noción del encuentro hermenéutico sale de escena."
El da cuenta que en su documento conjunto "Extraños no más", los obispos de Estados Unidos y México alentaban un diálogo entre migrantes y la comunidad receptora. "Los obispos parecen alentar una apertura característica de diálogo verdadero; al encontrar al Otro como un Tú, una persona con realidad, con historia y valor, nuestra auto-comprensión podrá ser retada y podría cambiar. Ya no podríamos ser superiores; podríamos ser en solidaridad," escribió Meder.
Meder cuestiona porqué los líderes de la iglesia no alientan a una apertura similar con los homosexuales en la iglesia.
"Tal vez los católicos, al perder una parte de su auto-comprensión, podrían ganar algo nuevo e inesperado. Tal vez hay un camino para vivir el Evangelio el cual se nos ha negado escuchar. Tal vez hay un modo de cristianismo practicado por muchos de entre nosotros - pero en secreto. Tal vez es tiempo de que el Evangelio de los clerigos que son homosexuales sea proclamado. Podemos no estar listos para una proclama tan fuerte, pero también así como loco fue Cristo por muchos en sus día," él escribió.
Del artículo, afirmó Gaud: "No pensamos que fuera apropiado." Preguntado si el tema de la homosexualidad hacía al artículo inapropiado, Gaunt contestó, "nuestro juicio editorial fue que en su forma presente no era apropiado; no era apropiado."
Gaunt dijo que el no sentía ninguna presión para evitar algunos temas o puntos de vistas. "Esta es nuestra publicación. Nosotros ejercemos el juicio de lo que debe salir," él afirmó.
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