Y parece que la Iglesia Católica le creyó, por Juan Pablo II lo fue a felicitar.
El ex dictador chileno comentó ésto, informa la BBC, después de que fuera declarado mentalmente apto para un juicio.
"... hizo estas declaraciones durante un interrogatorio efectuado por el juez que investiga los crímenes de la Operación Colombo. "Todo lo que hice, todo lo que decreté, todos los problemas que tuve se los dedico a Dios, todo se lo dedico a Chile porque se permitió que el país no fuera comunista y surgiera como es hasta hoy", le dijo Pinochet al juez Víctor Montiglio.
Cuando el juez le preguntó al general retirado sobre la formación y funciones de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINA), éste respondió que no se acordaba.
El ex Presidente militar dijo que lamentaba las muertes que se produjeron durante su mandato.
"Lamento y sufro por esas pérdidas. Pero si Dios hace las cosas, él me perdonará si me excedí en algo, que no creo".
Amén, Así sea y Bendito sea Dios. No por nada la Iglesia Católica apoyó a Franco y a Hitler también, firmando con ellos sendos concordatos, aunque ahora diga que se arrepiente. No por nada se le dice aún nacionalcatolicismo a las actuales burradas de la iglesia en España. Digánle eso a los obreros católicos perseguidos y a los jesuitas asesinados por Hitler. Digánle eso a los homosexuales mandados a campos de trabajos forzados enviados por Franco y a los que sacerdotes les decían que se arrepintieran de sus pecados para salir de ahí... Como dice el dicho, el camino al infierno está tapizado de buenas intenciones, como las del señor Pinochet.
miércoles, noviembre 16, 2005
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
Todos los dictadores obran por culpa de la gracia divina, no hay dictador que no incluya a dios en sus discursos.
AL final jesus es un comunista-fascista-neoliberal-nacionalista y demases....
Publicar un comentario