Los puños cerrados de Joseph Raztinger (Benedicto XVI) ayer en su conferencia de prensa en su avión cuando volaba hacia Brasil, respondiendo si los legisladores de la Ciudad de México debían ser excomulgados por haber votado a favor del derecho de las mujeres a decidir. El dijo que sí, pero su lenguaje no verbal dice mucho más... No habla de amor, sino de sacrificio. Ojalá leyera a San Mateo, cuando recuerda que Jesús les pide a sus discípulos que den amor, y no impongan sacrificios. Pero ojalá lea también la carta de San Pablo a los Romanos, donde les pide obedezcan a sus autoridades civiles...
Luego su mismo vocero le enmedaría lo que dijo, pero nadie le puede enmendar lo que sus manos expresaron.
PD. Si pueden lean el libro El cuerpo nunca miente de Alice Miller, una herramienta muy útil para entender lo que realmente dicen los que dicen hablar de la paz y el amor.
3 comentarios:
¿No seas malo puedes pasarme la editoral del libro? Aqui en Puebla no lo encuentro :S
Es de TusQuets, yo lo compré en el DF en El Péndulo.
Hola.
Para comenzar el amor no hace mal al projimo. Obiamente yo no tengo el derecho ni el deber de ir contra la vida de otro aun mas si este es mi hijo.
Respecto a lo de obedecer a nuestras autoridades pues hay que obedecerlas segun dice la Escritura porque han sido puestas para nuestro bien. Ahora si alguna quiere nuestro mal no debemos obedecerlas.
sALUDOS,
dANIEL
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