Extraña muerte de diácono en la Ciudad de México

Ayer murió de forma extraña Juan Francisco Castrejón Aguado, un joven diacono de 34 años, en la Ciudad de México, y hay cosas extrañas en esta muerte.

- Se investiga si fue suicidio o si fue asesinato.
- Parece ser fue lo segundo, ya que hubo dos balazos en su cuerpo, y una testigo afirmó ver un hombre bajando del auto donde ocurrió la acción. Además del lado del copiloto la ventana estaba a la mitad.
- El muerto tenía la camisa desabrochada.
- En unos meses sería ordenado sacerdote.
- Era diacono personal del Obispo auxiliar de la Arquidiócesis de la Ciudad de México, Marcelino Hernández, presuntamente involucrado en un fraude como reporta la revista Proceso.
- Además Marcelino Hernández es Vicario de la VII Vicaria de la Arquidiócesis, con sede en San Miguel Chapultepec. Esta es quizás la vicaria más rica de la capital del país, ya que cubre parte de las Lomas de Chapultepec, una de las colonias más ricas no sólo de la ciudad, sino de todo México.
- Murió dentro de su automóvil, en la madrugada, después de cenar con "unos conocidos" en un restaurante de la céntrica colonia Nápoles. Recibió un balazo en el cuello y otro en la espalda.
- El no trabajaba en la colonia Nápoles, sino en la parroquia de San Miguel Chapultepec, en las oficinas de la VII Vicaria, con el obispo Marcelino Hernández.
- Los encargados de la investigación presumen que el asesino era conocido de Castrejón.
- Castrejón salió en la noche del sábado de su parroquia, solamente diciendo que iba a cenar con algunas personas.

Seguramente aquí no terminará la historia...

Actualización: el Reforma cuenta en un texto de Arturo Sierra su versión en línea que el Servicio Médico Forense determinó que no fue suicidio, pero hay una incongruencia en si fue un tiro en el abdomen o en el torax el que lo ultimó...