El periódico Reforma reporta hoy las declaraciones de Rodrigo Aguilar Martínez, Presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Familiar cuestionado por el inicio de la campaña contra la homofobia que a partir de hoy empieza a difundir por radio en varias ciudades de México la Secretaría de Salud ( a través de Censida ) y el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación.
Pues el Obispo de Matehuala, hizo una declaración tan desafortunada que quedará en los anales de la estúpidez de la iglesia católica por mucho tiempo. Primero lo de cliché, luego lo más divertido:
"Dios creó al hombre y la mujer como sexos complementarios, y cualquier promoción de las relaciones homosexuales es un atentado contra la dignidad humana...."
Y ahora la joya: "Está atentando al ser humano, y tarde o temprano se notarán las consecuencias; el deterioro de la dignidad del ser humano, el relativismo al que se ha referido el Papa, que no hay valores absolutos, que cada quien pueda pensar lo que guste, que tenga opción personal y se le respete, eso conduce a un individualismo..."
Es increíble el Super Yo fascista que tiene la iglesia católica y muy especialmente la jerarquía. Es terrible atestiguar el miedo que le tienen a que los fieles puedan pensar como gusten! Que tenga una opción personal y se les respete! Cuanto temor a que dos personas se amen! Ya sé que no escuchan a sus fieles, ¿pero se escucharán a sí mismos? Lo dudo seriamente, su ego es tan duro que los protege de toda duda, y si es que se llega a acerca la traduce como viniendo del diablo o algo así, cuando es que traen al diablo en la espalda... ¿Y dicen que ésta es la religión de amor de Jesús? Quizá en un momento lo fue, o lo es en círculos muy pequeños aún. Y verdades absolutas en un mundo multicultural que se globaliza... ¿qué a esos hombres no les enseñan antropología o sociología en el seminario? O sólo con el hecho de viajar uno lo ve. El problema es que espíritu ya no ve, está ciego, y lo que es peor: no quiere ver... así ni Jesús podría curarlo aunque regresara, ya que ha perdido la fe, ha perdido el amor. Es triste ver a "pastores" así. Secos como piedras que se parten poco a poco por la fuerza del viento...
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