domingo, abril 24, 2005

Zapatero al PP: digánle a los homosexuales que son españoles de segunda

En una fuerte respuesta a la negativa de los diputados populares de legalizar el derecho a las parejas gays a casarse - sólo desean darles un contrato legal que no sea llamado matrimonio aunque tenga las mismas prerrogativas - el presidente del gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero le pidió al PP que:

"... que "mire a la cara" a los millones de homosexuales que hay en España y les explique por qué quiere que sigan siendo "españoles de segunda", en alusión al rechazo 'popular' a la regulación del matrimonio homosexual.

Arropado por la plana mayor del PSPV durante un mitin que ha celebrado en el Parque del Oeste de Valencia para conmemorar el primer aniversario de la llegada al Gobierno, Rodríguez Zapatero ha advertido, en clara referencia a la Iglesia Católica, que él va a seguir desarrollando los derechos y libertades de todos porque eso hará de España un país más próspero.

"Hemos dado un avance sustancial en algo que constituye una piedra angular en nuestro proyecto político para el bienestar, para el futuro de España: hemos luchado y avanzado en la igualdad de derechos entre los españoles, entre las mujeres y entre los hombres, como un principio esencial de una sociedad madura, justa y avanzada".

En un año, prosiguió, hay españoles que ya tienen los derechos "que se les había negado durante décadas y todavía hay algunos que lo combaten". Acto seguido lanzó una pregunta al aire: "¿Por qué las personas con una opción homosexual van a ser de segunda categoría si tienen derecho a tener la misma categoría de los heterosexuales?".

Acto seguido, invitó a los dirigentes del PP a que "en el trabajo, en casa, miren a la cara (a los homosexuales) y les digan: vosotros sois españoles de segunda". "Que se lo digan y les expliquen por qué", respondió entre los aplausos de la gente..." (vía El Mundo)

Bien por Zapatero, bien por España. A pesar de los aires de odio que se respiran en Roma hacia gays y lesbianas que sólo piden compartir sus amores, la libertad de amar sigue avanzando en Europa, y ojalá pronto llegue también a América Latina. Si Jesús estuviera aquí seguramente estaría del lado de los que se se aman. Si solo Roma pensara menos y sintiera más....

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